Angela

Por más que uno quiera el dolor no se va... escribí esto para mi Angelita querida, te extraño mucho, tía lancha!







































Ha pasado más de un mes ya y nada parece haber cambiado.

Ayer, al levantarme, miré al cielo
El Sol al amanecer sigue saliendo.
Y aun así, cuando me levanté, yo no ví Sol en el cielo.

Ayer, salí y miré a la gente,
La gente todos los días sigue sonriendo.
A mí, en cambio, cada día me cuesta más sonreír.

Ayer, caminando por la calle, oí pájaros.
Los pájaros aún siguen cantando.
Pero para mí, la canción es discordante.

Ayer, a la tarde miré al cielo
El Sol todas las tardes se sigue poniendo.
Mas yo no pude verlo, no pude ver el Sol.

Ayer, al acostarme, de nuevo miré al cielo.
Las estrellas cada noche siguen titilando.
Aunque en mi cielo ahora falta la estrella más brillante.

Ayer desde mi cama, escuché a alguien rezar.
Todas las noches, a los ángeles invocando.
Mas el ángel que yo más quería nunca más regresará.

Ayer, antes de dormir, miré al cielo.
La Luna desde él me sonrió, brillando.
Pero la Luna de mi cielo hace mucho que no está.

Y hoy! Hoy me levanté, y amaneció de nuevo.
Vi sonrisas y oí pájaros. Y a la tarde se puso el Sol.
Y a la noche las estrellas titilaron,
Y alguien a los ángeles les rezó,
Y por último como siempre, la Luna brilló y me sonrió.
Hoy me levanté y me acosté. Y nada, nada cambió.

El mundo siguió girando, aun sin tu amor
Sin tu luz, sin tu sonrisa, sin tu voz, sin tu cariño, sin tu alegría, sin tu presencia. Sin vos.

Hoy a mi me falta un ángel, un ángel que ya no está.
Un ángel que de tan bueno, decidió volverse al Cielo.
Hoy a mi me falta todo, me falta una madre, me falta una amiga, me falta una compañera.

Y el mundo siguió girando, y así seguirá siempre.
Y nada es diferente, y sin embargo nada es igual.
Para mi y otros dos niños, ya nada, nunca más volverá a ser igual.