Perdida

Hoy me siento con ánimos de romper la rutina Barilochense y no voy a hablar del viaje.
En realidad es uno de esos días en que el sol se pone más temprano, la noche te ahoga un poco, la soledad se hace presente y extrañas lo que fue y ya nunca volverá.
Estoy perdida en estos momentos en la vida, puedo ver dos caminos muy diferentes y no sé cuál tomar, por la simple razón de que no sé cual es el que realmente quiero...
Es verdad lo que dicen que Bariloche te cambia la vida...a mi me ha cambiado mucho, no demasiado porque ya no hay mucho que cambiar en mí, pero igual siento que no quiero seguir dejando que me lleve la corriente...
Quiero hacer algo que me llene y no sé que es ese algo... quisiera realmente tener a alguien a mi lado sobre cuyo hombro llorar esta noche, esta noche cuando empezás a despertar, empezás a darte cuenta que tu vida se acabó y que al mismo tiempo sigue. Y que tenés que decidir como seguirla.
Las únicas palabras que vienen a mi mente ahora son "no sé"
Solo sé que lo único que me desahoga ahora es escribir, cantar y dibujar.
Quiero llegar muy alto, pero no sé si mis alas den para tanto.
Se lo dije a alguien una vez, estoy cansada de estar sola, se tener que luchar tanto para conseguir tan poco, de esperarte sentada en silencio.
Estoy cansada de pensar en que mañana será el día para pensarlo, de esperar que la vida me dé alguna respuesta, de mirarte y preguntarme qué es lo que siento por vos.
Estoy cansada de estudiar, de ser fuerte, de no llorar, de ser inteligente, de ser buena.
Estoy cansada de que me critiquen, de que no me apoyen, de que me engañen, de que me mientan y me vuelvan a mentir, de que me usen y desusen, de que me pidan y no me den nada.
Estoy cansada de esperar que la vida me pague todas las que me ha hecho, estoy cansada de ver lágrimas en los ojos de la gente que más quiero, estoy cansada de ser testigo del dolor de mis amigos.
Estoy más que nada cansada de que todo eso me afecte, de no ser capaz de decir, "a mi que me importa" y seguir adelante. Estoy muy muy cansada de extrañar y añorar y sentir nostalgia y de amar.
Estoy cansadísima de amar, de querer, hasta de odiar sin recibir más que indiferencia fría.
Tal vez simplemente estoy cansada.